Desde pequeños, nos han enseñado que el amor es sufrimiento.
Lo hemos visto en las historias de nuestras madres, abuelas, o en tantas parejas a nuestro alrededor.
Nos contaron que para que el amor perdure, debemos sacrificarnos, aguantar, e incluso renunciar a nuestra propia felicidad.
Y ahí es donde empieza la confusión: aprendimos a asociar el amor con el dolor. Pero quiero que te detengas y pienses por un momento, porque el amor no debería ser un sacrificio.
Nos han hecho creer que sufrir es una parte inevitable del amor, que si duele, es porque es real.
Pero esto no es verdad.
Lo que hemos visto, lo que nos han enseñado, no es amor verdadero.
Es el resultado de patrones antiguos que hemos heredado, donde la obligación, el sacrificio y la privación de libertad se confundieron con el afecto.
Es hora de desaprender todo esto para poder volver a aprender qué es realmente el amor.
El amor no tiene que ver con el sufrimiento.
El amor es libertad, apoyo, respeto y comprensión.
Cuando amas a alguien, no deberías sentirte controlado/a o limitado/a.
El amor debería ser ese espacio donde puedes ser tú mismo/a, sin miedo, donde sientes que tienes la libertad de crecer y de ser feliz.
El amor verdadero es abundancia, es pasión, es deseo de estar con la otra persona, no porque estés obligado/a, sino porque genuinamente quieres compartir la vida con ella.
Es llegar a casa con ganas de estar, con ganas de compartir momentos, de disfrutar del tiempo juntos.
El amor no es una condena, no es un peso que llevas sobre tus hombros, esperando que algún día las cosas mejoren.
En Union Love, escucho muchas historias de personas que han vivido relaciones donde han sido obligadas a sacrificar su felicidad, su bienestar emocional, todo por esa creencia de que “así es el amor”.
Pero eso no es amor.
La obligación creada no es amor.
Es control, es manipulación, y muchas veces, es una manera de mantenernos atrapados/as en relaciones que no nos hacen bien.
Es momento de aprender que el amor verdadero es apoyo incondicional, es querer que la otra persona crezca, sea feliz, y se sienta segura.
Es una relación basada en el respeto mutuo, en el cuidado, en las ganas de estar ahí para el otro/a.
Y si no es así, entonces no es amor.
Si te encuentras en una relación en la que sientes que tienes que sacrificar tu bienestar o tu libertad para mantenerla, quiero que sepas que tienes todo el derecho a reevaluar esa situación.
El amor no debería hacerte sentir menos, ni debería exigirte renunciar a tu felicidad.
Si te ves sometido/a a sufrimiento constante en nombre del amor, quizás es hora de preguntarte si realmente estás en una relación que vale la pena.
En Union Love, abogamos por relaciones saludables y llenas de cariño verdadero.
El amor no es sufrimiento, ni sacrificio, ni privación de libertad.
El amor es un espacio donde ambos se apoyan, se cuidan y se comprometen a hacer lo mejor el uno por el otro. Y quiero que sepas que ese tipo de amor existe.
Mereces un amor que te haga sentir vivo/a, no uno que te haga sentir atrapado/a.
Es hora de desaprender lo que nos han enseñado sobre el amor, de soltar esas creencias antiguas que nos han hecho daño, y de aprender de nuevo lo que el amor realmente es un espacio de libertad, de respeto y de apoyo incondicional.
