Hoy quiero hablarte de algo importante, algo que muchas veces pasamos por alto cuando estamos inmersos en una relación que no nos hace sentir bien.
Y quiero empezar haciéndote una pregunta:
¿Qué mereces realmente?
A veces me encuentro con personas que, en lugar de recibir amor y respeto, sienten que son una carga para su pareja.
Si él o ella no te habla, si no se esfuerza por ti, si te hace sentir que está contigo solo por estar…
¿Qué sentido tiene seguir en ese lugar?
Sé que duele.
Sé que es difícil soltar, pero también sé que tú, en el fondo, ya sabes la respuesta.
Y si te lo preguntas honestamente, ¿de verdad quieres quedarte en un lugar donde no te sientes valorado?
Te lo digo con todo el cariño del mundo, si te hacen sentir como una molestia, si no se esfuerzan por ti, es momento de volar.
Deja que esa persona se vaya y que siga su camino.
Porque tú mereces mucho más que alguien que solo está contigo por estar.
No te engañes pensando que algo cambiará si no ves ningún esfuerzo de su parte.
Quiero que te lo preguntes de nuevo:
¿Qué mereces?
¿Mereces una relación donde te ignoran?
¿Una relación donde te hacen sentir como si fueras un peso muerto?
Estoy segura de que la respuesta es un rotundo no.
Dentro de ti, tú ya sabes que mereces amor, respeto, admiración.
Merezco estar con alguien que me valore por completo, que se esfuerce por mí, que me haga sentir querido y que me cuide como yo cuido de esa persona.
No te estoy diciendo que lo dejes todo de un día para otro.
Sé que cada situación es única, pero sí te animo a reflexionar.
A preguntarte seriamente si estás en el lugar correcto, si esa persona está contigo de la manera en que tú necesitas y mereces.
Porque si no es así, créeme, es mejor soltar.
Mejor volar y dejar que esa persona siga su camino.
Al final del día, no queremos estar con alguien que no nos valora, que no nos cuida, que no nos ama como merecemos.
Recuerda que el amor no es una obligación.
No es algo que debamos mendigar o aceptar en migajas.
El amor verdadero se da en abundancia, se expresa en cada pequeño detalle y, sobre todo, se siente.
Si no lo sientes, si te preguntas constantemente si estás donde deberías, quizá sea el momento de replantear tu camino.
Así que, te pregunto una vez más:
¿Qué mereces? La respuesta está dentro de ti, y cuando la encuentres, estoy segura de que sabrás exactamente qué hacer.
No tengas miedo de volar. Al final, todos merecemos un amor que nos haga sentir vivos, que nos haga sentir valorados.
¡No te conformes con menos!